Una instalación eléctrica exterior debe cumplir con algunos requerimientos especiales y tener ciertas características diferentes al resto de las instalaciones convencionales. Hay que tener en cuenta que las zonas exteriores expuestas a la intemperie y/o a la alta afluencia de personas necesitan contar con un sistema eléctrico que sea resistente, estético y perdurable en el tiempo.

 

Por esta razón las instalaciones eléctricas en exteriores suelen ser tan robustas, ya que sus componentes deben contar con niveles de protección adicionales (como los IP e IK que explicaremos más adelante). Estas protecciones ofrecen una mayor durabilidad para áreas exteriores donde no solo la intemperie puede degradar el material, sino también diferentes tipos de impactos mecánicos.

 

Grave error sería utilizar en una instalación eléctrica exterior elementos y materiales que están diseñados únicamente para usos y aplicaciones en ambientes interiores, donde por lo general no existe ningún factor de exigencia.

 

 

¿Qué es una instalación eléctrica exterior?

 

Una instalación eléctrica exterior es aquella que se implementa para distribuir y utilizar la energía eléctrica en zonas al aire libre, como jardines, terrazas, aparcamientos, piscinas, áreas sociales, parrilleras, lavabos industriales, instalaciones deportivas, etc. Debido a su exposición a las condiciones ambientales y climáticas, estas instalaciones requieren consideraciones muy específicas de diseño, selección de materiales y métodos de instalación para asegurar su fiabilidad, seguridad, y durabilidad.

 

Los componentes eléctricos de este tipo de instalación deben estar correctamente aislados de la atmósfera exterior. En este sentido, se trata de instalaciones que cuentan con interruptores y enchufes estancos empotrados. Estos sistemas de estanqueidad y empotramiento son los que evitan la entrada de la humedad, del polvo y de la suciedad.

 

También, estas instalaciones cuentan con el uso de tubos y cables resistentes a ciertos factores de degradación (luz solar, temperaturas altas y bajas, lluvias, golpes, fricciones, corrosiones, abrasiones, presiones, doblamientos, aplastamientos, etc.).

 

A nivel de funcionamiento, todos estos elementos y dispositivos para exteriores funcionan igual que las versiones para interiores. Por ejemplo, un enchufe exterior tiene el mismo aspecto y diseño a los que se pueden encontrar en una sala, oficina o habitación. La diferencia está en que, en el caso de los enchufes de una instalación eléctrica exterior es necesario protegerlos con elementos adicionales para evitar que el agua, el polvo o el sol puedan llegar a dañarlos.

 

 

¿Qué tubería se usa para una instalación eléctrica exterior?

 

 

Una tubería eléctrica exterior debe ser capaz de proteger los cables ante una variedad de factores potencialmente dañinos, tanto ambientales como humanos, que suelen estar presentes en entornos exteriores. De allí que uno de los criterios más importantes al momento de elegir una tubería sea su material de elaboración.

 

Los materiales más usados en tubos para instalaciones eléctricas exteriores son acero, hierro, aluminio, polietileno y cloruro de polivinilo.

 

Dicho esto, los principales tipos de tuberías que se usan en una instalación eléctrica exterior para el paso de los cables son los siguientes:

 

• Tubos EMT: los tubos metálicos eléctricos (Electrical Metallic Tubing) se fabrican de acero o aluminio, ofreciendo una excelente resistencia a la corrosión. A pesar de ser metálicos, son también muy ligeros.
• Tubos IMC: los tubos de tipo conductos metálicos intermedios (Intermediate Metal Conduit) son de acero galvanizado, y se caracterizan por ser más gruesos y resistentes que los EMT, pero también más pesados.
• Tubos PVC: los tubos de cloruro de polivinilo (Polyvinyl Chloride) son de los más utilizados a nivel mundial. Destacan por ser bastante ligeros, económicos y ofrecen una excelente resistencia a la corrosión.
• Tubos CPVC: los tubos de cloruro de polivinilo clorado (Chlorinated Polyvinyl Chloride) son similares a los de PVC, pero están tratados con cloro, lo que les proporciona una mayor resistencia a la temperatura, a la corrosión, y a productos químicos en comparación con el PVC convencional. Sin embargo, son más pesados y costosos.

 

De toda esta clasificación de tubos para instalaciones eléctricas exteriores, unos de los más utilizados en España son los tubos PVC de Simon. Estos son de tipo corrugado, una característica de diseño que los hace altamente flexibles (con un alto nivel de torsión y doblado), resistentes a impactos y compresiones, y muy fáciles de transportar e instalar.

 

En cuanto a dimensiones, estos tubos PVC se encuentran disponibles en grosores de 16 mm, 20 mm y 25 mm, y en longitudes de 10 m, 15 m y 25 m.

 

En cuanto a niveles de protección, ofrecen una resistencia a la compresión de 320 Newtons, lo que significa que pueden resistir estas fuerzas sin deformarse completamente y así garantizar la integridad de los cables protegidos en su interior.

 

También, proporcionan una resistencia al impacto, generalmente presentada en Joules, donde cuánto más elevado mayor será la capacidad de absorción de impacto sin sufrir daños críticos como grietas o roturas. 

 

 

¿Qué cable se usa para una instalación eléctrica exterior?

 

Las características de los cables para una instalación eléctrica exterior varían según el lugar y la función que va a cumplir cada conexión en particular. Es decir, ¿qué elemento o dispositivo se espera alimentar con ese cable? Por ejemplo: sistemas de riego, luminarias terrestres, luminarias acuáticas, timbres, sensores, puntos de recarga de coches eléctricos, etc.

 

En líneas generales, lo que se hay que tener en cuenta al seleccionar un cableado para exteriores es lo siguiente:

 

1. Estos cables deben tener un aislamiento y una cubierta resistentes a los factores externos (radiación UV, humedad, cambios extremos de temperatura, abrasión física, etc.). También es crucial que los cables sean resistentes al agua, ya sea mediante diseño (como cables con cubiertas impermeables) o mediante la instalación en conductos adecuados.
2. Para aplicaciones donde el riesgo de daño físico es alto, como en instalaciones eléctricas exteriores en áreas accesibles al público o donde se realizan actividades que puedan impactar el cableado, los cables deben tener una resistencia mecánica robusta, posiblemente mediante el uso de refuerzos adicionales.
3. Es importante que el cableado cumpla con las normativas locales e internacionales relevantes para instalaciones eléctricas, garantizando así su seguridad y rendimiento óptimo.
4. La selección del cable debe considerar la capacidad de carga eléctrica requerida para la aplicación específica, asegurando que pueda manejar adecuadamente la corriente eléctrica sin sobrecalentarse ni comprometer la seguridad.

 

En Simon contamos con una variedad de tipologías de cables fabricados con características y materiales específicos para satisfacer las necesidades de múltiples entornos y requerimientos de conectividad. Por ejemplo, para instalaciones eléctricas exteriores tenemos los siguientes cables:

 

• Cables H05VV-F: cables de 2 hilos de 1 mm2 y 1.5 mm2 de diámetro, y cables de 3 hilos (con tierra) de 1.5 mm2 y 2.5 mm2 de diámetro. Ambas tipologías vienen en mangueras redondas con longitudes de 5 m, 10 m, 75 m, 100 m, 150 m y 300 m.

 

Cuando un cable es H05VV-F significa que tiene las siguientes características:

 

• H: está homologado o armonizado según las normas nacionales e internacionales.
• 05: tiene una tensión nominal de 300/500 V~, pudiendo soportar hasta 500 voltios.
• V: el material de aislamiento de su conductor es PVC.
• V: el material de su cubierta exterior también es PVC.
• F: es un cable flexible de cobre (clase 5) para servicios móviles.

 

• Cables unipolares H07V-K: cables de un hilo (unipolar), con diámetros de 1.5 mm2 y 2.5 mm2. Ambos grosores vienen en mangueras redondas de 5 m, 10 m, 25 m y 300 m. En colores verde/amarillo, amarillo/verde, azul, marrón y negro.

 

Cuando un cable es H07V-K significa que tiene las siguientes características:

 

• H: está homologado o armonizado.
• 07: tiene una tensión nominal de 450/750 V~.
• V: el aislamiento de su conductor es de PVC.
• K: es un cable flexible de cobre (clase 5) para instalaciones fijas.

 

• Cables H07RN-F: cables de 3 hilos (con tierra), con diámetros de 1,5 mm² y de 2,5 mm². Los primeros vienen en mangueras redondas de 125 metros y los segundos de 80 metros.

 

Cuando un cable es H07RN-F significa que tiene las siguientes características:

 

• H: homologado.
• 07: tensión nominal de 450/750 V~.
• R: el aislamiento de su conductor es de caucho.
• N: su cubierta exterior es de neopreno.
• F: cable flexible de cobre (clase 5) para aplicaciones que requieren movilidad.

 

Con base en estas tipologías, el H07RN-F de Simon es el mejor cable para una instalación eléctrica exterior, debido a la resistencia que proporciona el caucho para el aislamiento de su conductor y el neopreno para su cubierta exterior.

 

 

¿Qué enchufe se pone en una instalación eléctrica exterior?

 

 

Una de las características más importantes de un enchufe para una instalación eléctrica exterior es que este debe presentar un grado de protección IP44 o superior y uno de IK también elevado. Pero ¿qué son estos grados de protección?

 

Por un lado, el grado de protección IP se refiere a la clasificación Ingress Protection establecida por la norma internacional IEC 60529, la cual indica diferentes niveles de protección que puede presentar un dispositivo eléctrico frente a partículas sólidas (con calificaciones desde el 0 hasta el 6) y agua (con calificaciones desde el 0 hasta el 9).

 

Por otro lado, el grado de protección IK está relacionado con la clasificación Impact Resistence establecida en la norma IEC 62262, que describe los distintos niveles de potección que pueden proporcionar los envolventes de materiales eléctricos contra los impactos mecánicos externos (con calificaciones desde 00 hasta 10).

 

Teniendo en cuenta estas normativas, los enchufes schuko de la serie Simon Aqua resultan ser los más adecuados para una instalación eléctrica exterior, ya que poseen un diseño estanco que les permite alcanzar los grados IP55 e IK07. Veamos:

 

• Protección IP55 de los enchufes de Simon: el primer 5 indica una de las más elevadas protecciones contra el polvo, mientras que el segundo 5 indica que ofrece protección contra chorros de agua de alta presión.
• Protección IK07 de los enchufes de Simon: el 07 indica que el material es capaz de resistir impactos moderados equivalente a una energía de 2 joules o a una caída de 500 g a 40 cm de altura.

 

Hay que destacar que estos enchufes schuko son 2P (con dos polos) y tienen un sistema de conexión a tierra TT Lateral (los contactos de tierra están situados en los lados del enchufe). Gracias a ello, se garantiza que cualquier corriente de fuga o en caso de cortocircuito se dirija a tierra, minimizando el riesgo de choque eléctrico.

 

A nivel de diseño, los enchufes schuko de Simon para instalaciones eléctricas exteriores están disponibles en modelos monoblock y componibles. Los monoblocks son unidades de una sola pieza, donde todos los componentes están integrados en un solo cuerpo o carcasa. Los componibles son sistemas modulares que te permiten combinar diferentes componentes según las necesidades específicas de cada instalación.

 

Como ves, en Simon ponemos a tu disposición un ecosistema de accesorios eléctricos aptos para todo tipo de contextos, tanto para una instalación eléctrica exterior como interior en ambientes domésticos, comerciales, industriales y urbanos.